Soy alemana, de origen venezolano, y vine desde mi muy temprana juventud en 1974 a vivir en Berlín.

Nací en Caracas, Venezuela, el 14 de julio. Padre periodista, publicista y profesor universitario, madre artista (pintura y escultura).
Estudié química hasta finalizar con el doctorado (Dr. rer. nat.) en la Universidad Técnica de Berlín y trabajé durante más de 12 años como científica en el Hahn-Meitner-Institut de Berlín (ahora Helmholtz-Zentrum Berlin), donde adquirí mi experiencia profesional en el campo de la Química Aplicada a la salud, nutrición y medioambiente. Realicé trabajos de cooperación interdisciplinaria a nivel internacional y publiqué más de 35 artículos científicos. Gerencié la revista científica “Trace Elements and Minerals in Health and Nutrition” por una década. Luego me dediqué a la transferencia de conocimientos en „ciencia, tecnología y cooperación“ a través de mi propia empresa ICOCOKO.
Durante siete años, a partir del 2004, apliqué mis conocimientos en Venezuela en el sector de Aduanas, nacional e internacional, trabajando como jefa de Gestión Medioambiental de la Aduana Venezolana y como jefa de la División de Laboratorio de Aduana. En 2008 contribuí activamente para que las “Aduanas Ecológicas” de Venezuela se incorporaran al Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente: „Aduanas Verdes“ (Green Customs). Tuve la oportunidad de participar como delegada de Venezuela en varias COP de los acuerdos ambientales multilaterales de Basilea, Montreal, Rotterdam y Estocolmo internacionales.
Desde 2012 hasta julio de 2020, trabajé en la empresa ALISEO Germany GmbH, que tiene su central en la Selva Negra, y dirigí tres áreas de responsabilidad: Gestión de proyectos de la región de Asia-Pacífico, certificación de productos para la exportación y como directora de sostenibilidad corporativa.
Intento tener muy presentes los aspectos de sostenibilidad en mi vida, como por ejemplo: la reducción del estrés en el lugar de trabajo, el compromiso con el aire y el agua limpios, que también son ejemplos de un estilo de vida saludable, ante todo, siempre teniendo en cuenta la conservación de la vida y los hábitats, que son los que crean confianza para el futuro de las generaciones.
Pero sostener la vida significa también tener en cuenta los aspectos de la alimentación espiritual y mental. En este nivel, por ejemplo, la lectura, las actividades musicales y la meditación son de gran importancia. Es aquí donde me dedico al coaching motivacional bajo la consideración de enfoques de sanación naturales para un estilo de vida positivo.